MISIÓN DE LA CONGREGACIÓN CLARETIANA


La Congregación de Religiosas de María Inmaculada Misioneras Claretianas fue fundada por San Antonio María Claret y María Antonia París, en Santiago de Cuba en 1855. Nació en la Iglesia para ser “Una Orden nueva, pero no nueva en la doctrina, sino nueva en la práctica”. Su razón de ser en la Iglesia es la participación en su misión evangelizadora que se realiza a través de múltiples apostolados en muchos países de América, África y Europa. La creación de los Centros Educativos responde a la misión misma de la Congregación: “A imitación de los Apóstoles, enseñar a toda criatura la Ley Santa del Señor”, es decir, enseñar el Evangelio a los alumnos/as, en primer lugar, y a todos los miembros de la Comunidad Educativa.